Es desesperante cuando postulas a muchas ofertas y no recibes ni una llamada. Si llevas mucho tiempo buscando trabajo y te preguntas “¿por qué no me llaman?”, este artículo te va a ayudar. Pueden ser varios los motivos por los cuales las empresas no se contactan contigo. En este artículo, los analizaremos y presentaremos una lista de aspectos que puedes cambiar para encontrar empleo lo antes posible.
Motivos por los cuales no te han llamado
- No cumples con los requisitos de la oferta. Aunque crees que eres la persona ideal, los requisitos que ha puesto el reclutador son indispensables para ejecutar el trabajo. Por ello, aunque puedes aprender, si piden ciertos conocimientos o experiencia, debes cumplir con esos requisitos; de lo contrario, es mejor no postular. No solo se trata de incluir las palabras claves que te aconsejamos según tu perfil, sino de que, además, dichos datos sean ciertos.
- Un currículum mal redactado. Si a tu currículum le falta información, está mal estructurado o es confuso, seguramente el reclutador no le prestará atención, ya que tiene a más postulantes esperando y con un CV más fácil de leer.
- Datos de contacto erróneos o desactualizados en tu CV.
- No has respondido al cuestionario que pedía la empresa o no has adjuntado la carta de presentación.
¿Qué puedes hacer para mejorar en tus postulaciones?
1. Revisa tu CV, corrige las faltas de ortografía y compleméntalo con toda la información. Recuerda añadir palabras clave de tu sector para que los reclutadores te encuentren con mayor facilidad.
2. Complementa todos los requisitos de tu CV. Cuánto más completo, será más fácil para el reclutador saber que cumples con las características de su candidato ideal.
3. Añade una foto profesional, tipo carné de identidad o pasaporte. No utilices una imagen tuya en la playa o de fiesta, ya que eso da la sensación de que eres una persona poco confiable.
4. Añade imágenes, portafolio o links de tus trabajos anteriores. Muchas veces aportar muestras de lo que hemos hecho puede inclinar la balanza hacia nuestro favor. Puedes crear una carpeta y compartirla, o bien subirlo a la nube y añadir el vínculo en tu CV.
5. Lee bien la oferta; postula solo si cumples con los requisitos que piden y si te gusta la empresa. Realiza una búsqueda de la organización y analiza si sería un buen lugar en el cual podrías desarrollar tu carrera profesional.
6. Continúa formándote. Existen cursos que te ayudarán a mejorar tu perfil y te permitirán postular a vacantes. Encontrarás cursos gratuitos en Internet, como, por ejemplo, Coursera.
7. Adjuntar recomendaciones a tu solicitud puede ayudarte a posicionarte mejor como candidato, ya que existen personas que recomiendan tu trabajo y avalan tus habilidades.
8. Cartas de presentación personalizadas. No puedes crear una carta de presentación estándar; debes adecuarla a cada puesto al que postules, ya que cada empresa valorará o requerirá unas características u otras.
9. Revisa perfiles profesionales de tu mismo sector. No hay nada malo en ver cómo se presenta la competencia, e incluso algunos perfiles que te parezcan interesantes para poder saber cómo los elaboran ellos y rescatar ideas.
10. En cada vacante a la que te plantees aplicar, ponte en el lugar del reclutador y pregúntate si, con tu experiencia y tus habilidades, eres la persona que mejor podría encajar en ese puesto. Si la respuesta que te das no es un “sí” rotundo, quizás ahí ya tienes una pista de que esa vacante no es para ti. No te crees falsas esperanzas aplicando a muchas vacantes para las que no eres el candidato óptimo.
Organiza tu búsqueda de empleo
Si ya seguiste los pasos anteriores, crea un listado de puestos de trabajo a los que te gustaría postular. Pregúntate qué quieres aprender y qué te gustaría aportar al puesto de trabajo.
Cuando tengas claro tu objetivo, organiza la búsqueda de empleo. Dedica cada día un tiempo a evaluar las ofertas, postula con tiempo para poder adecuar cada uno de tus documentos a las candidaturas, cumplimenta toda la información que pide la empresa, revisa los estados de tus postulaciones anteriores, dedica tiempo a chequear tu correo -incluso tu bandeja de correo no deseado o spam– y establece una rutina que te ayude a mantenerte activo.
Es importante no perder la esperanza. Puedes meditar, realizar ejercicios y crear objetivos a corto plazo; por ejemplo, postular a 5 ofertas que encajen realmente conmigo o escribir una carta de presentación para tal empresa.
Plantearte los objetivos y realizar actividades para procurar alcanzarlos a lo largo del día te ayudará a recuperar la confianza y te dará la sensación de que tu búsqueda está bien estructurada y es fructífera.
Y cuando te llamen…
Si has seguido estos consejos, llegará el momento en que se pondrán en contacto contigo para concertar una entrevista; debes estar listo para superar la prueba con éxito.